REPLICAS DE UN ENCUENTRO MEMORABLE

Queridos amigos, en realidad todos Uds. han plasmado lo que realmente uno sintió en esos momentos tan maravillosos que pasamos juntos, donde no nos dimos cuenta como paso la hora y si la cuenta salio cara nadie se percato de eso porque el momento fue realmente extraordinario..... Ojala que sigamos juntándonos para volver a tener esa sensación tan bonita y sentir que el tiempo no ha pasado.... gracias amigos nos vemos pronto
Su amigo de siempre

Leo

Este saludo con mucho cariño y afecto es a todos quienes nos hicieron el favor de volver al pasado, recordar nuestra época del glorioso liceo Eduardo de la Barra, en aquel lugar donde de vez en cuando en los patios severos formábamos antes de entrar a clases bajo la atenta y severa pero cariñosa mirada del "Mono" Ramírez, nuestro Inspector general o del turco Eluani, a quien cariñosamente además le decíamos "Maquinista o diez para las doce", pues tenía la cabeza torcida, o el charro Godoy o nos entreteníamos mirándole las piernas a la señora Pozo o a la hermosa Yolanda, o como no recordar esas pichangas en el cerro, al lado de la avenida Alemania, o tratar de engañar a Benito para que nos dejara salir a comprar, o aquella farándula que hicimos con motivo del centenario, recordemos que somos hijos y somos centenarios del Liceo, muy pocos tienen ese privilegio, lo tuvimos. Pienso que sería largo y nos demandaría muchas tertulias nocturnas el recordar esos hermosos pero que jamás volverán días de nuestra juventud, adolescencia, pero si lo tenemos en nuestros recuerdos, y aún más, creo, que hoy y después de la velada que tuvimos, una vez más, al menos así lo siento, nuestro Liceo nos dio una gran formación y por sobre todo educación, que hoy no se ve, y a él debemos agradecerle lo que somos y como hijos de él, debemos siempre tenerlo presente en nuestros actos y decir a todo Chile con mucho orgullo: “Liceanos viriles muchachos, de almas noble y de gran corazón, en las aulas forjáis vuestro temple y al liceo brindáis prez y honor", ese es nuestro norte. Gracias liceo y gracias compañeros y amigos, recuerden, muchos ingresamos al liceo en 1956 y salimos en 1964, o sea infancia, juventud y adolescencia, HOY TERCERA EDAD O ADULTO MAYOR. Un especial abrazo y saludo a Iván Sepúlveda, que además de liceano, amigos del cerro, del barrio, de la hermosa Población Salles en el Cerro Polanco. Luego nos veremos.
Con cariño y afecto a todos y ya nos veremos a fines de agosto.

Pato Araya